Desde el mes de junio habia tenido en mi escritorio el cd “El Brillo de mis Ojos” la más reciente producción de Jesús Adrian R. A menudo me regalan algunos recursos de los cuales me dan para escuchar, mirar, leer y en esta ocasión desde hace ya varios meses atras habia tenido este CD sin abrir en el que no sabia qué hacer pues anteriormente ya tenía esta producción.
Queria obsequiarlo. La razón es porque dentro de su contenido se encuentran canciones que llegan al alma pero no quería solo regalarlo a cualquier persona sino que a una persona que de verdad lo necesitara. Fue entonces esta semana que finalmente lo tomé y lo entregué a una mujer que tiempo atrás he conocido y le he compartido sobre el propósito de Dios a su vida. Más que una acción de cariño fue una forma de ministración. Dos dias mas tarde hablé con ella y me comentaba sobre el encuentro que tuvo con Dios tras escuchar esas canciones, me comentaba sobre su reacción y sobre cómo le ha ayudado y bendecido a pesar de la situación difícil que ha estado viviendo en su familia. ¡Gloria a Dios!
Muchas veces en nuestras vidas no salimos de nuestras posibilidades y avanzamos más allá de lo que podemos salir. No necesariamente se trata de que otros lo hagan sino que nosotros podemos y lo hagamos. ¿Por qué espere tanto? No lo sé, pero finalmente despues de un buen tiempo este material llegó a la persona correcta, en el lugar correcto, en la forma correcta y en el tiempo correcto.  Si tenemos algo con lo que podemos bendecir (que todos tenemos), ofrescámoslo, obsequiémoslo, abramos nuestros corazones hacia la humildad, el amor, el cariño y hacia el compartir lo que tenemos.