¿Qué pueden aprender las mujeres de los hombres? Cultura / Influencia / Relaciones Interpersonales

mujeres-vs-hombresLa premiación de Miss Universo es una de las ceremonias más aclamadas y vistas en el mundo ya que cada año desfilan decenas de mujeres en representación de sus países para competir por el premio más alto de la belleza. Sin embargo, el concurso no solo se basa en la belleza física, sino en la capacidad de expresarse con los temas actuales en el mundo. Incluso, uno de los momentos más angustiantes de la ceremonia es la hora de las preguntas, donde este domingo pasado en la premiación «Miss Universo 2014» no fue la excepción.

Cuando este pasado domingo se le preguntó a la participante (y luego ganadora) Paulina Vega de Colombia «¿Qué pueden aprender las mujeres de los hombres?», su respuesta no fue convincente pues respondió: «Pienso que las mujeres pueden…es una pregunta muy difícil. Pienso que todavía existen hombres que creen en la igualdad, y eso es lo que pienso que las mujeres deben aprender de los hombres». Todos estamos de acuerdo en que esta respuesta fue muy pobre y no fue la mejor respuesta que esta chica pudo haber dado.

Muchos dicen que la pregunta es incluso difícil de contestar, pero es interesante que muchas personas piensan tanto para dar una respuesta correcta, ¿será que las mujeres no han puesto atención en qué aprender de los hombres? Por tal razón quiero dejarte estas cosas que las mujeres pueden realmente aprender de los hombres.

Antes de proseguir quiero aclarar que mi objetivo no es ni criticar a Paulina Vega, ni a su país. Ni estoy a favor de los hombres, ni en contra de las mujeres. Solo daré varias razones que pueden responder esta pregunta convincente y efectivamente:

1. La capacidad de guardar silencio. 

Una de las cosas más grandes que las mujeres pueden aprender de los hombres es ver como viven el mundo. Los hombres fuertes saben guardar silencio y eso es admirante. Los hombres guardan más silencio no porque no tengan nada que decir, sino porque entienden que no tienen que llenar el aire con palabras para dominar conversaciones. Ellos ya dominan por el hecho de quienes son, pero son serenos en ese aspecto. El hecho de que alguien no diga algo, no significa que no tiene nada en mente. Aprender a guardar más silencio es algo que las mujeres deberían aprender de los hombres. El aire en el que estamos difícilmente se puede mejorar con el sonido de las palabras. Si no estás mejorando con el silencio, ¿por qué hablar? El arte del silencio interpersonal es sentarse con un compañero sin hablar, y sin embargo no sentirse incómoda—en lugar de llenar el ambiente con charlas ociosas.

2. La entrega a ganar sin importar los individuos

Supuestamente las mujeres colaboran mejor que los hombres, pero son los hombres los que realmente comprenden el trabajo en equipo. Muchos de ellos jugaron deportes en equipo cuando crecían y aprendieron cómo establecer objetivos comunes y trabajar juntos hacia ellos, lo que se ve claramente en el mundo empresarial. Los hombres exitosos que he conocido saben cómo rodearse del mejor equipo y cómo delegar. De los deportes en equipo, los hombres también aprendieron que está bien enojarse con uno al otro—las mujeres deberían aprender de ellos. A lo que me refiero es que las mujeres se enfocan más en quién está en el equipo y quién no debería estar. Las mujeres se echan así mismo para abajo porque se preocupan más sobre el individuo que por el equipo o el objetivo de ganar. Por tal razón las mujeres siempre han hecho bien en los deportes individuales, pero han quedado cortas al estar en deportes de equipo. En otras palabras, deben aprender a trabajar con otras mujeres e individuos, sin tratar de competir entre ellas mismas.

3. La facilidad de decir las cosas claras y sin rodeos

Los hombres son más hábiles al responder preguntas sin dar muchas vueltas, cosa que las mujeres se les dificulta más hacer. Usualmente las mujeres al hablar para expresar un opinión, rodean su objetivo para llegar al punto. En cambio, los hombres llegan al punto con más facilidad. Los hombres no se complican la vida en expresar sus opiniones cuando les preguntan y no quieren perder tiempo en darle vueltas al asunto.  Cuando se habla con mayor claridad, se siente mayor claridad, y se puede aliviar una carga enorme. Si las mujeres fueran más asertivas en sus opiniones y expresiones sin dar rodeos en sus respuestas o callar lo que piensan, conseguirían más fácilmente lo que quieren y negociarían mejor.

4. La destreza de tomar las criticas no tan personalmente
Las mujeres podrían aprender de los hombres a no aceptar las críticas de manera tan personal, sobre todo en situaciones de trabajo, aunque también en situaciones personales. Las mujeres tienden a pensar que si te gusta una persona, esa persona expresará acuerdo con ella, los hombres suelen hacerlo diferente. Por ejemplo, un hombre puede explorar una idea de diferentes formas al verla de diferentes ángulos. Cuando sucede esto, él no está literalmente atacando la idea, sino que está explorándola. Pero una mujer sólo podría pensar: «Él odia mi idea», o incluso, «Él me odia». Lo mismo aplica en las situaciones personales. Una mujer puede sentirse atacada personalmente si su esposo o novio o un amigo no está de acuerdo con ella en público. Mientras ella piensa que él está siendo desleal, él podría sentir que al debatir está mostrando compromiso intelectual, compañerismo y respeto. Las mujeres deberían ser más receptivas a esta perspectiva.

5. La cualidad de entender el poder 

Una de las ventajas del privilegio masculino es la asertividad innata y sentido de derecho. Por desgracia, la idea de que la mujer debe ser agradable y servicial acomodándose a los deseos de la demás gente aún prevalece. Al igual que los hombres experimentan vergüenza cuando violan las normas de género, las mujeres deben tratar de superar esa vergüenza para que aprendan a ser asertivas. Las mujeres deberían aprender a vivir la vida como lo hacen los hombres: con la presunción de que se merecen solicitud, respeto y atención.

6. La habilidad de ser prácticos

Gran parte de las veces las mujeres se complican la vida al hacer las cosas. No estoy diciendo que los hombres son simples y que hacen las cosas sin sentido, sin preparación y sin creatividad, sino que son más prácticos en realizar las cosas. Los objetivos se pueden alcanzar sin la necesidad de complicarse tanto las metas. Muchas veces por tanta complicación se crean desacuerdos, desánimo, pereza, estrés y hasta conflictos. Tanto los hombres como las mujeres pueden lograr sus objetivos estratégicamente, simplemente que las mujeres demasiadas veces complican tanto lo que puede hacerse con más facilidad y deberían considerar este aspecto en sus vidas.

Decir que las mujeres no tienen nada que aprender de los hombres (como muchas lo han dicho) simplemente revela la falta de atención y disposición por querer mejorar individualmente (ver número 2 arriba). Es cierto que las mujeres y los hombres son diferentes emocionalmente, físicamente y mentalmente; no mejores, solo diferentes. Así como los hombres necesitan a las mujeres, también las mujeres necesitan de los hombres. Mi objetivo no es que las mujeres empiecen a ser como los hombres, sino que consideren aprender estas características esenciales de los hombres que efectivamente deberían aplicarse a sí mismas para vivir mejor tanto con ellas mismas, como con los hombres y con la sociedad.

¿De cuál de todas las cosas de arriba crees que las mujeres deberían aprender más? ¿Te gustaría que publicara las cosas que los hombres deberían de aprender de las mujeres? Coméntame abajo. 


Alekz es un comunicador apasionado con la misión personal de inspirar a una nueva generación de personas a soñar más, luchar más y lograr más. Actualmente reside en la ciudad de Nueva York donde es director de la revista Onda Exclusiva, está al frente de la Alianza de Radios Cristianas en Español y trabaja en la NASA. Si no está enseñando o capacitando, está viajando o frente al micrófono. Disfruta hablar de Jesús pero naturalmente, con creatividad y sin rodeos a través de sus publicaciones. Lleva la comunicación en la sangre, la educación en el alma, la ciencia en la mente y la fe en el corazón.

Comentarios

  1. yerusa adith dice: junio 16, 2016 at 3:52 pm

    si me gustaría saber que cosas pueden aprender los hombres de las mujeres

    • Alekz Aminadab Mundo dice: junio 17, 2016 at 3:37 pm

      ¡Hola Yerusa! Me parece una idea fantástica lo que comentas sobre el tema de lo que los hombres pueden aprender de las mujeres. Mantente al pendiente, pues pronto escribiré al respecto. Gracias por la sugerencia amiga.

Responder a yerusa adith Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *